Luego de las fiestas de carnaval párroco llama a la localidad a reflexionar y hacer obras mas agradables a dios

Luego de las fiestas de carnaval párroco llama a la localidad a reflexionar y hacer obras mas agradables a dios
ISLA MUJERES, 21 de febrero.-Con la imposición de ceniza, este miércoles inicia el periodo de cuaresma haciendo un llamado el sacerdote de la localidad Jesús Martínez Penilla a reflexionar y hacer obras más agradables a Dios.
El sacerdote mencionó que este miércoles en la iglesia de la Inmaculada Concepción hará misa de imposición de ceniza a las 10 de la mañana y las 19:00; en la iglesia de la Caridad de Cobre esta ceremonia se realizara a las 16:30.
De igual manera habrá imposición de Ceniza a las 07 horas en la iglesia de Guadalupe; a las 11:00 horas y luego a las 19:00 horas se hará lo mismo en la catedral del “Sagrado Corazón de Jesús” estos últimos oficiados por el sacerdote Raúl Sánchez Alonso.
Con respecto a la cuaresma el párroco Martínez Penilla dijo que se espera que así como los jóvenes y adultos disfrutaron y vivieron el carnaval, también pongan el mismo amino en ofrecer a Dios obras buenas.
Lamento que a pesar de toda la propaganda que se hace para dar a conocer el inicio de la cuaresma con la imposición de la ceniza, es alrededor del dos por ciento de la población los que se acercan a la casa de dios.
Abundó que la imposición de la ceniza en forma de cruz, solo es una “Disposición” que la iglesia ofrece para aceptar la conversión a Dios, es decir pasar de una vida más disipada a otra más tranquila.
Dejo en claro que la imposición de ceniza no es tan importante como los cristianos vuelvan a Dios arrepentidos de sus pecados y demostrarle su amor y fidelidad.
Mencionó que este miércoles inicia la cuaresma y con ello los días de ayuno y abstinencia es decir evitar comer carne rojas y de aves los viernes, consumiendo en su lugar pescados y mariscos.
Abundó que lamentablemente la cultura de penitencia se está olvidando y no es algo privativo de Isla Mujeres, aunque lo ideal y lo que la iglesia busca es que en lugar de una abstinencia física y alimentaria, se convierte en una conversión a Dios para no ofenderlo con malas acciones.